ARQUITECTURA SINGULAR Y EL PAVIMENTO COMO PROTAGONISTA

Concebir el suelo tan sólo como superficie plana donde pisamos, es una realidad que hoy en día se queda corta. Durante los últimos años, han emergido en el panorama nacional e internacional cada vez más proyectos que nos invitan a reflexionar y darnos cuenta de que el pavimento puede dejar de ser un elemento secundario para pasar a ser el agente principal.

Un claro caso que ejemplifica esta afirmación es el proyecto de guardería YueCheng en Pekín de MAD Architects, terminado a finales de 2019. El edificio, que convive con la arquitectura preexistente del lugar, forma un «techo flotante» que conecta varios espacios independientes. La topografía ondulada marca una especie de paisaje marciano, que invita a los niños a correr, jugar e interactuar con el entorno y entre ellos.

Este resultado tan “efectista” no sería posible si el material empleado en dicha cubierta no fuera un pavimento continuo, que careciendo de juntas ni cortes en su ejecución potencia esa sensación de manto continuo en tonos vivos.

Otro ejemplo, quizás menos impactante pero más familiar es la Plaza de Santa Bárbara de Nieto Sobejano en Madrid. Esta intervención tuvo como objetivo fundamental la creación de una gran área peatonal a modo de “salón urbano” donde se jugaba con pavimentos de distintos materiales. La pavimentación de granito de gran dimensión se alterna con superficies generadas por una geometría pentagonal que incorpora áreas de césped, zonas de juegos y de estancia en resina, pavimentos de madera y un pequeño pabellón de vidrio para venta de libros y flores.

En ambos casos, el elemento suelo juega un papel decisivo y aporta riqueza al entorno urbano en el que se implanta. Pero no sólo en exteriores podemos encontrar proyectos en los que el pavimento y el color cobran importancia, sino que también existen muestras en espacios interiores de otros sectores.

En el caso del Grupo de Escuelas ‘Simone Veil’ en Colombes del estudio Dominique Coulon & associés, se hace uso del color y materiales para generar dos lenguajes completamente opuestos para que sus jóvenes alumnos diferencien dentro de un mismo edificio las instalaciones de primaria y preescolar.

 

Otro ejemplo es el espacio coworking Yuanyang Express We + de los arquitectos nipones MAT Office, donde sobre un pavimento continuo de resina marcan de forma ingeniosa vías de paso, generando entre ellas zonas de trabajo que sugestionan al usuario y lo enmarcan en el espacio.

Que el pavimento es un elemento en el que los arquitectos se apoyan, tanto para zonificar como para impresionar a los viandantes lo hemos visto en colegios, oficinas, incluso en hospitales y hoteles, pero ¿qué sucede en el sector residencial?

Podemos llegar a pensar que por lo general somos reacios a incorporar este tipo de recursos en el interior de nuestras viviendas. No obstante, por suerte hay clientes que de la mano de grandes diseñadores se atreven a arriesgar y desarrollar proyectos poco convencionales que nos invitan a explorar nuevas formas de habitar.

La vivienda del bailarín Antonio Najarro, diseñada por el arquitecto Raúl Almenara es un ejemplo que merece la pena analizar. Con una planta en espiral en tres tonos de rosa, el pavimento consigue articular de forma inevitable todas las estancias, dando lugar a diferentes usos que vienen dados por el propio color. Es curioso cómo, los usos de la vivienda no se acotan, sino que se definen por su grado de intimidad según el espacio en que se ubican.

A nosotros como empresa, nos enorgullece formar parte de este último proyecto tan singular y desde luego, estamos dispuestos en este nuevo año que comienza a seguir creando nuevas soluciones que nos lleven siempre un paso más allá, que supongan un impacto visual que ayude a tener una percepción más amable de los espacios que nos rodean.